Isabel Ruiz Martínez, veterinaria del Grupo Peñagrande, nos habla sobre una enfermedad emergente que cada vez se diagnostica más en las clínicas veterinarias: La enfermedad del gusano del corazón.
¿Qué es el conocido como gusano del corazón?
Dirofilaria immitis, también conocido con el famoso nombre de “gusano del corazón”, es un parásito nematodo canino y felino transmitido por la picadura de mosquitos culícidos.
Las larvas de este parásito, denominadas microfialarias, se hayan en la sangre de los animales infectados. Cuando el mosquito pica a un perro o gato infectado, ingiere la sangre de este, donde también se encuentran las larvas parasitarias. Cuando este mismo mosquito pica a otro animal, le trasmite las larvas, las cuales difundirán por todo el torrente sanguíneo, creciendo y afectado a diferentes órganos del cuerpo, pulmones y corazón principalmente.
La localización más característica de estos vermes en su estado adulto es el ventrículo derecho del corazón y los grandes vasos cardiacos como la arteria pulmonar o la vena cava.
¿En qué lugares hay más prevalencia?
Esta enfermedad es más propensa a encontrarse en aquellas regiones donde se den las condiciones ambientales óptimas de humedad y temperatura para el desarrollo de los vectores (mosquitos). En España estas regiones solían estar localizadas principalmente en las zonas costeras del sur, de ahí que se hiciera sobre todo hincapié sobre esta enfermedad a aquellos propietarios que viajaran al sur de vacaciones con sus mascotas, pero cabe destacar que, a día de hoy, con el calentamiento global, cada vez hay más y más regiones donde esas condiciones óptimas se dan, haciendo que prácticamente casi toda la península sea endémica.
¿Qué sintomatología produce?
La sintomatología va apareciendo de forma lenta y progresiva. Inicialmente los signos clínicos más característicos de esta enfermedad es la tos, la disnea o dificultad respiratoria, la pérdida de peso, el cansancio y la apatía. Con el desarrollo del parásito y por lo tanto avance de esta enfermedad, estos síntomas acaban evolucionando a patología cardiacas congestivas, tromboembolismo, hipertensión pulmonar, derrame pulmonar, etc. Alteraciones sistémicas que pueden perjudicar la vida y salud de nuestra mascota.
¿Como podemos prevenir esta enfermedad?
Teniendo en cuenta la gravedad de esta enfermedad parasitaria, debemos actuar de forma profiláctica, estableciendo un buen protocolo preventivo. La prevención frente a este parásito se basará en la utilización de productos antiparasitarios correctos.
Por un lado, existen tratamientos inyectables que poseen intervalos de administración anuales, permitiéndonos proteger a nuestras mascotas durante periodos de tiempo mayores.
Por otro lado, es muy importante que protejamos a los animales externamente, mediante productos, como pipetas o collares, que prevengan la picadura de los diferentes artrópodos, como en este caso, la de mosquitos.
Cuantos más puntos abarquemos en nuestra prevención, mayor protección le concederemos a nuestras mascotas. Mediante un protocolo adecuado de desparasitación, será fácil prevenir, no solo esta enfermedad, sino también, muchas otras transmitidas por parásitos que se ven habitualmente en la clínica.
Para saber más sobre esta enfermedad y los protocolos de actuación que seguimos, no dude en acercarse a cualquiera de nuestras clínicas, donde estaremos encantados de proporcionarles más información al respecto de este tema y resolver todas sus dudas.
No sabía que era una enfermedad tan frecuente! Muchas gracias
Nos gustan vuestros artículos
Súper interesante!!