El páncreas es un órgano abdominal con funciones endocrinas (encargado del metabolismo de la glucosa) y exocrinas (regula el metabolismo de las grasas). La pancreatitis ocurre cuando se produce una inflamación del páncreas, afectando principalmente a la parte encargada de regular las funciones exocrinas. Existe una mayor predisposición en perros que en gatos, siendo más frecuente en animales de edad media a avanzada y con predisposición racial en Terries, Schnauzer y Cocker.
En la mayoría de los casos, la etiología de la enfermedad es desconocida (pancreatitis idiopática), aunque se sabe que existen ciertos factores que predisponen a padecerlo como son: dietas altas en grasa, obesidad, hipotiroidismo, traumatismos agudos, reacciones a fármacos o tóxicos o diabetes mellitus
¿Qué síntomas va a desarrollar mi perro?
Los pacientes que padecen pancreatitis muestran de manera aguda letargia y disminución del apetito. En el 90% de los casos cursan con vómitos, dolor abdominal, fiebre y, en algunas ocasiones, diarreas.
Se trata de una situación de urgencia, en la que debes acudir a tu veterinario lo más rápido posible, con el objetivo de prevenir posibles complicaciones desencadenadas por la patología. Además, la pancreatitis es una enfermedad muy dolorosa que requiere tratamiento en la mayor brevedad posible. El protocolo diagnóstico de la pancreatitis incluye una analítica sanguínea completa que incluya un marcador pancreático específico y una ecografía abdominal.
¿Qué consecuencias puede tener la pancreatitis?
- En el caso de destrucción de un gran número de células pancreáticas exocrinas, se produzca una insuficiencia pancreática exocrina
- Si se produce destrucción de células pancreáticas endocrinas, puede desencadenar en una diabetes mellitus.
- En el caso de desarrollar una peritonitis se pueden producir adherencias entre órganos abdominales
¿Existen formas de prevenir la pancreatitis?
La respuesta es sí y se basa fundamentalmente en realizar un correcto manejo dietético.
Una correcta nutrición y un peso saludable mejora la salud de nuestras mascotas a largo plazo. En el caso de perros con predisposición a padecer pancreatitis, es fundamental alimentarles con dietas bajas en grasa, repartir la dosis diaria de pienso en varias tomas al día y eliminar la comida humana de la nutrición de tu mascota.
Además, no olvides que realizar un chequeo completo anualmente es fundamental para anticiparnos a cualquier condición en nuestro peludo.