En esta ocasión, Irene, veterinaria de nuestro Hospital Veterinario La Moraleja, nos explica todo lo que necesitamos saber sobre intoxicaciones:
Hablamos de paciente intoxicado cuando se ha producido el contacto accidental o provocado del animal con una sustancia potencialmente tóxica para él.
Existen multitud de sustancias potencialmente tóxicas para los animales, algunas más obvias, como son los raticidas, lejía, algunas plantas (especialmente las hortensias), la cebolla, el chocolate, etc. Y otras que producen un efecto tóxico solo en ciertos animales debido a la concurrencia con determinadas situaciones. Por ejemplo, un antiparasitario externo (como puede ser una pipeta) diseñado para perros administrado en un gato puede producir una intoxicación rápida y grave del animal, debido a la toxicidad que estas sustancias tienen para los gatos.
La forma de contacto que con más frecuencia se presenta es la ingestión de estas sustancias por vía digestiva, aunque no es la única. Existen otras formas de contacto con tóxicos, como pueden ser la vía cutánea y la vía respiratoria. Asimismo, las intoxicaciones digestivas no solo se producen por ingestión accidental de tóxicos, sino que ciertos fármacos pueden presentar una mayor toxicidad en función de las características del animal.
Los síntomas que más comúnmente se presentan están muy relacionados con la vía de contacto con el tóxico. Cuando se ha producido una ingestión accidental, frecuentemente se presentarán síntomas digestivos, como son las diarreas y los vómitos, inapetencia, etc. Sin embargo, cuando el contacto se ha producido por vía cutánea (por ejemplo, una reacción a pipetas antiparasitarias) se presentarán más frecuentemente picores exacerbados, enrojecimiento de la zona, lesiones en la piel, e incluso convulsiones.
Es muy importante detectar de forma temprana los posibles síntomas que puedan recordarnos a una intoxicación, ya que el tiempo que tardemos en actuar será determinante para el pronóstico de la situación, así como para evitar otros efectos a nivel orgánico, como puede ser un fallo renal o hepático.
¿Debo acudir al veterinario?
Debes acudir SIEMPRE a tu veterinario de confianza y tratar de explicarle, mientras realiza la anamnesis, todos los detalles de lo ocurrido. Conociendo el origen de la intoxicación, podrá pautar el tratamiento más adecuado según la situación.
Por tanto, ante cualquier sospecha de intoxicación, es fundamental que acudamos al veterinario para poder establecer un tratamiento con la mayor prontitud posible.
Teléfono de contacto de nuestro Hospital Veterinario La Moraleja para cualquier urgencia veterinaria: 917 557 559