Cuando tenemos un nuevo miembro de la familia, no desparasitamos bien a nuestra mascota o tiende a comer/ chupar cosas del suelo, hay veces que vemos que defeca gusanos blancos: Que son? Es grave? Que debo hacer?
En este post os vamos a explicar todo sobre este gusano.
Este gusano pertenece al grupo de los ascáridos y se denomina Toxocara canis (en el caso del perro).
En cachorros se puede dar la transmisión transplacentaria antes de nacer o vía lactogénica, por ello es importante una correcta desparasitación de la madre y una correcta desparasitación del cachorro. En cachorros se debe tratar con antihelmínticos apropiados con 2 semanas de edad y posteriormente repetir el tratamiento cada dos semanas hasta 2 semanas post- destete.
La infección se puede presentar en perros adultos en los que no se aprecian signos clínicos. Por ello, se debe llevar a cabo un análisis coprológico rutinario si tu mascota suele comer cosas del suelo y llevar un control y protocolo de desparasitación pautado por tu veterinario con el fin de evitar que, en caso de ingestión del parásito, este pueda llegar a adulto y reproducirse completando el ciclo dentro de nuestra mascota.
El periodo de prepatencia de Toxocara spp. Tras la ingestión por carnivorismo de un hospedador paraténico (roedor) o comida cruda infectada o por la ingestión de huevos en el medio ambiente ronda las 4 semanas.
La sintomatología que puede presentar nuestra mascota por parasitación de este parásito puede ser subclínica si presenta baja carga parasitaria. En casos de elevadas cargas parasitarias puede presentar adelgazamiento en adultos y abdomen atonelado en cachorros.
Si presenta una elevada cantidad de vermes (gusanos) se puede llegar a producir obstrucción intestinal o intuscepción (invaginación de un segmento del intestino dentro de otro)
Si un propietario decide no emplear un tratamiento antihelmíntico de forma regular, la realización de análisis coprológicos mensuales o trimestrales puede ser una alternativa.
Cada mascota necesita unas pautas de desparasitación específicas y tu veterinario te puede orientar sobre ellas. Hay veces que por el tipo de alimentación, vida, o sistema inmunitario de tu mascota se debe reevaluar el tratamiento antiparasitario.