Por qué:
Es una actividad muy importante para la comodidad del día a día de tu perro.
Primero porque cuanto más largas las tenga, más posibilidad de quedarse residuos y gérmenes incrustados dentro de ellas, originando infecciones que pueden resultar peligrosas para ellos.
Otra razón esencial es evitar que sufran lesiones, siendo una de las más comunes cuando se quedan atrapadas o enganchadas en alguna superficie, situación muy dolorosa, pudiendo complicarse con la fractura de la uña originándose sangrado abundante y posibles infecciones bacterianas secundarias.
También es importante saber que si le crecen en exceso , éstas crecen hacia el interior, arqueándose y terminan clavándose en las almohadillas pudiendo producirse heridas en las almohadillas que van a necesitar tratamiento veterinario.
Cuándo y con qué frecuencia:
Cuanto antes empecemos, desde cachorro, mejor para que se acostumbre a ello, será una rutina más en su vida igual que se le limpian los ojos, los oídos o los dientes.
Generalmente las uñas de los perros de razas pequeñas tienen una velocidad de crecimiento mayor que las de las razas medianas o grandes.
Así mismo influye la actividad del perro (a mayor nivel, mayor desgaste y menos necesidad de acudir al peluquero/veterinario a cortarlas).
Un buen indicador para saber si a tiene largas es colocarle de pie con las patas apoyadas en el suelo, sin sobresalir de la almohadilla y ver que la uña no roza la superficie.
Se puede hacer siempre y cuando sea necesario pero tomar como referencia un corte con cada visita a la peluquería puede resultar cómodo para todos los miembros de la familia.
Cómo:
En primer lugar, hay que tener material específico de corte de uñas de perros (los hay con diferentes tamaños para adaptarnos a las distintas razas) y polvos hemostáticos, para poder aplicar en caso de sangrado.
Es recomendable tener chuches para premiarle así como un ambiente relajado donde el paciente se encuentre receptivo.
La referencia para es corte será la vena que hay en el interior de la uña o zona viva de la misma. No se debe apurar el corte, ni llegar cerca de ella. En las uñas blancas es fácil observarla, pero hay mascotas que tienen el estuche ungual negro por lo que debemos cortar poco a poco e ir observando el interior de la uña para saber si podemos seguir cortando o no.
Una guía q nos puede ayudar en el caso de las uñas negras es no sobrepasar la línea de la almohadilla.
Consejo: Si tu perro tiene espolones, como no sufren desgastes, hay que vigilarlas con más frecuencia.
Cortar las uñas a tu propio perro no siempre es fácil, por ello ponemos a vuestra disposición nuestros servicios de peluquería del Grupo Peñagrande nos ocuparemos de sus uñas siempre y cuando sea necesario.